Después de una larga temporada llena de carreras, kilómetros de entrenamiento y aventuras en aguas abiertas, para muchos ha llegado el momento de dar un descanso a su traje de neopreno. El otoño marca para muchos triatletas el final de la temporada de aguas abiertas, y es precisamente ahora cuando se decide si tu traje de neopreno estará en plena forma en primavera. Con el cuidado adecuado, se mantendrá flexible, suave y listo para la próxima salida, tan pronto como el agua te llame.
Por qué es tan importante un cuidado adecuado
Un traje de neopreno es más que un simple equipo: es tu compañero más importante en el agua. Después de numerosas sesiones de natación, la sal, el cloro, los aceites de la piel y la suciedad se acumulan en el material. Si no se eliminan estos residuos, atacan el neopreno, lo vuelven quebradizo y reducen su elasticidad. Un almacenamiento incorrecto también puede dañar el traje: el calor, el sol o los puntos de presión lo envejecen más rápidamente. Si dedicas unos minutos al cuidado adecuado, prolongarás considerablemente su vida útil y te asegurarás de que el neopreno se sienta tan bien la próxima temporada como el primer día.
Paso 1: Limpiar: suave, a fondo, imprescindible
Después de la última sesión de natación, nunca debes dejar tu traje de neopreno húmedo en la bolsa. En su lugar, enjuágalo bien con agua fría y limpia, tanto por dentro como por fuera. Lo mejor es utilizar nuestro limpiador especial para neopreno y no jabón o detergente convencional. Asegúrate de limpiar con especial cuidado el cuello, las mangas y los bajos, ya que es ahí donde suelen acumularse los residuos. Para una frescura extra, utiliza un limpiador especial para trajes de neopreno que neutraliza la sal y las bacterias. A continuación, no escurras el traje de neopreno, solo apriétalo ligeramente para que el material permanezca intacto.
Paso 2: Secado: lento y suave
El sol y el calor son los mayores enemigos de tu traje de neopreno. Por lo tanto, no lo cuelgues bajo la luz solar directa ni sobre radiadores, sino en un lugar bien ventilado y a la sombra. Lo mejor es utilizar una percha Sailfish para evitar marcas de presión. Después de unas horas, puedes darle la vuelta al neopreno para que el interior también se seque por completo. De esta manera evitarás el moho y los olores desagradables, lo cual es especialmente importante si lo vas a guardar durante varios meses.
Paso 3: Almacenamiento: la hibernación perfecta
Cuando el neopreno esté completamente seco, puedes guardarlo. Lo ideal es un lugar fresco y seco, donde el material no esté expuesto a la luz ni al calor. Cuélgalo sin apretarlo en una percha resistente o colócalo en posición horizontal, lo importante es que no se arrugue ni se doble. Así evitarás marcas de presión o pliegues permanentes en el neopreno. Para una protección adicional, se recomienda utilizar una bolsa de almacenamiento transpirable que mantenga el polvo alejado, pero permita que el aire circule.
Consejo adicional: Comprobar y reparar
Antes de guardar definitivamente tu traje de neopreno para el invierno, vale la pena revisarlo rápidamente. Las pequeñas roturas, las costuras abiertas o los pegados sueltos suelen repararse fácilmente con pegamento para neopreno.
Listos para el inicio de la temporada 2026
Con el cuidado adecuado, tu traje de neopreno sobrevivirá sin problemas al descanso invernal. Así, en primavera podrás volver a concentrarte directamente en lo que realmente importa: tu entrenamiento, tu progreso, tu próxima competición. Porque un traje de neopreno bien cuidado es más que un simple equipo: es tu compañero en el agua.